Puedes encontrar en el basto mundo blogero (o blogeresco) consejos y recomendaciones de cómo escribir un blog, que contar, estadísticas de lo que le gusta a la gente, ideas para desarrollarlas y un largo etcétera. Bueno, a mí realmente me importa bien poco que es lo que dice esos artículos y como se tiene que escribir un blog, ya que en este espacio reservado, pretendo escribir de todo lo que me apetezca, actualidad política, música, cine, eventos deportivos, lo-que-sea, eso sí, con una condición: El no tener ni idea de lo que hablo. Sí, prácticamente como hace la mayoría de personas, pero con la salvedad que yo nada más empezar y conocernos ya lo estoy reconociendo.
Todo el mundo parece saber de todo, en televisión, radio, en ediciones digitales de periódicos o en sus propios blogs, cualquiera escribe o habla de toda materia habida y por haber, haciéndote creer que conoce de primera mano de lo que habla, una indudable mentira. Uno de esos tertulianos de que le da igual hablar de la situación económica de España sin saber que es un balance, del Real Madrid sin haber visto más de 45 minutos del partido (aunque viendo el fútbol que hace, tampoco hay que ver el resto) , de leyes, física cuántica y de química inorgánica. Joder, si tan inteligente eres como es que lo único que haces es tener un blog cutre o hablar 10 minutos en una radio, o en un canal chungo de la TDT (sobre todo eso)
Sin un estilo determinado ni determinable comenzaré a publicar entradas de lo que sea, que como he dicho, lo mismo mañana escribo uno sobre política, que hago una reflexión sobre la discografía de Van Morrison.
Debido a la explotación laboral, mis extraños hábitos de dormir entre 7 u 8 horas, comer y otras necesidades fisiológicas no me dejan mucho tiempo para escribir tanto como me gustaría, así que intentaré publicar semanalmente, quincenalmente o a saber.
En fin, que bienvenidos a la estación del zoo, donde se habla de todo sin tener idea de nada. Pónganse cómodos hasta que llegue el próximo tren.
Jukebox: U2 - Beautiful Day
1 comentarios:
bonjour et bonne chance; attendons les prochains trains
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